Citas de Tirano Banderas
Tirano Banderas es la mejor novela de Valle-Inclán con la cual acaba su ciclo esperpéntico. Ambientada en un lugar ficticio de Sudamérica, Santa Fe de Tierra Firme, es una novela que refleja una sociedad atemorizada por la figura del tirano; el tirano es Santos Banderas, su personaje está basado en Primo de Rivera. Fue un gran ejemplo a seguir para todos los escritores latinoamericanos de “novela de dictador”, como Augusto Roa Bastos.
“San Martín de los Montenses, aquel desmantelado convento de donde una lejana revolución había expulsado a los frailes, era, por mudanzas del tiempo, Cuartel del Presidente Don Santos Banderas. --Tirano Banderas-- (Valle-Inclán 15).
“Todas esas lucubraciones del protocolo suponen un desconocimiento de las realidades americanas. La Humanidad, para la política de estos países, es una entelequia con tres cabezas: El criollo, el indio y el negro. Tres Humanidades. Otra política para estos climas es pura macana” (21).
“Tirano Banderas, agaritado en la ventana, inmóvil y distante, acrecentaba su prestigio de pájaro sagrado” (22).
“El carcamal diplomático esparcía sobre la fatigada crasitud de sus labios una sonrisa lenta y maligna, abobada y amable” (24).
“[…] el indio es naturalmente ruin, jamás agradece los beneficios del patrón, aparenta humildad y está afilando el cuchillo […]” (37).
“El Director-Propietario de El Criterio Español” tenía una pluma hiperbólica, patriotera y ramplona, con ferviente devotos en la gachupia de empeñistas y abarroteros” (38).
“[…] nuestra América se ha independizado de la tutela hispánica, pero no de sus prejuicios, que sellan con pacto de fariseos, Derecho y Catolicismo […] los pueblos amarillos se despiertan, no para vengar agravios, sino para destruir la tiranía jurídica del capitalismo, piedra angular de los caducos Estados Europeos” (43).
“--¡Mirar por la cultura es hacer patria!”(53).
“--¡Domiciano, toma la vida como la vida se merece!” (63).
“--España podrá valer mucho, pero las muestras que acá nos remite son bien chingadas” (84).
“--¡Chingado Banderitas, hemos de poner tus tajadas por los caminos de la República!” (99).
“--¡Taitita, querés vos poneros trompeto!” (106).
“--El funesto fénix del absolutismo colonial renace de sus cenizas aventadas a los cuatro vientos […]” (125).
“Y en nuestro ideario, la piedra angular, la redención del indio, es un sentimiento fundamentalmente cristiano” (127).
“--¡Me tiraniza pidiéndome tan justa gramática!” (141).
“Las Colonias Extranjeras sin exclusión de ninguna, representan intereses pocos simpatizantes con el ideario de la Revolución […]” (171).
“--Querido colega, convengamos en que las relaciones diplomáticas no puede regirse por las claras normas del Evangelio” (172).
“--¿Qué limpieza de notas se le puede pedir a un presunto cadáver?” (173).
“-- ¡No es justo quedés en el mundo para que te gocen los enemigos de tu padre, y te baldonen llamándote hija del chingado Banderas!” (183).
Obra citada:Del Valle-Inclán, Ramón. Tirano Banderas. México: Ediciones Coyoacán, 2000. Impreso.